
Vivo en la noche
y no consigo dormirla.
El corazón rechaza cualquier indicio
de sueño.
Nada me llevo que no te di antes.
Miro mis manos apenas visibles.
De las tuyas, ni rastro.
Muero en la noche y en las luces
de la ciudad que empiezan a apagarse.
Cruje la casa.